Esta entrada intenta dar un nuevo enfoque a esta noticia: «Un anciano de 74 años mata a su hijo discapacitado y después se suicida tras explicar que no podría encargarse de él». NO voy a explicar esto desde una perspectiva socio-psicológico, NO es un caso que vaya a resultar habitual y NO se explica por la falta de apoyo a la dependencia. Es un hecho que seguramente se explique por factores individuales, pero sin duda hay unos factores sociales que actúan como detonante. Y esos factores sí son la falta de fondos, de apoyo a la dependencia y la desesperación de aquellos que se sienten desamparados.
Antes de nada, vamos a ver un vídeo, sólo os va a llevar 4 minutos y podréis entender de qué vamos a hablar, por qué vamos a hablar de ello y sobretodo porqué es importante que sepáis lo que es la indefensión aprendida.
Como vemos, el proceso de laindefensión aprendida, está relacionado con la sensación de control que tenemos sobre nuestra vida. En el vídeo podemos ver una aplicación a la educación, pero realmente es extrapolable a cualquier proceso comparativo.
El teórico que describió este proceso fue Martin Seligman, que básicamente postuló que al sentir que no controlamos los sucesos negativos que vamos experimentando, aparecen una serie de emociones que provocan una desmotivación generalizada, es decir, podrían acercarnos a algo parecido a la depresión.
Generalmente hablamos de la indefensión aprendida en procesos interpersonales o grupales pequeños, y no solemos utilizarla para hablar de grandes masas poblacionales como lo haríamos con las leyes sociológicas. Sin embargo, creo que este proceso afecta a cualquiera que se sienta desamparado por el estado al que está pagando con sus impuestos, o todo aquel que se siente en una situación desigualitaria.
No quiero establecer una sintomatología ni decir «eh señores del PP, estáis enseñando indefensión al pueblo», pero si pensamos un poco, puede que no sea algo tan descabellado. Es por eso que explico lo que es la indefensión aprendida y os dejo un vídeo donde se demuestra que en 2 minutos puede lograrse una muestra muy básica de este proceso.
Sin embargo, no todo acaba aquí. Martin Seligman también es el padre del pensamiento positivo, que es una corriente que nos incita a pensar positivamente, marcarnos unos objetivos entre lo realista y lo optimista y esforzarnos en conseguir nuestros objetivos.
Os dejo su charla en la conferencia TED como cierre y premio (refuerzo positivo para que volváis) de hoy. Además próximamente sacaré contenidos sobre pensamiento positivo y también sobre charlas TED.